domingo, 10 de enero de 2010

1600 km.


¿Era necesario irse tan lejos?




[...]


Estas distancias me reconcomen.Me enferma no sentir tu presencia cerca,sabiendo que aún a unos pocos kilómetros puedo tenerte conmigo en escasas dos horas.Lo sé.Es la distancia normal que nos separa.Pero esta vez es diferente.Te has ido,lejos de mí,a 1.600 kilómetros.

Faltan 5 días para volver a abrazarte,a tocarte,a sentirte,a olerte...5 días para cerciorarme de que todo fué un sueño rápido e indoloro y sentirte conmigo,tu piel rozando mi piel.5 días para la calma y para estar juntos,como siempre,juntos,repito esta palabra tantas veces...Sé que te gusta.Cuando alguno de nosotros la pronuncia nos miramos fijamente y sonreímos.Juntos.

Luego los demás se enfadarán por llenar mis espacios con tu nombre,por marcar mis lugares secretos con tus huellas y decir que sólo pienso en tí conforme pasan los días...Pero no importa.Ahora quiero y siento,que los demás entenderán que a veces diga que eres lo único que me importa,lo único a lo que realmente me entrego al cien por cien sin miedos,porque,(no todos,evidentemente) pero la gran mayoría,no merecen la pena a tu lado.

Eres tan grande por dentro que corres siempre el riesgo de explotar por fuera,cuando te brillan los ojos y sonríes por nada en concreto.Esos que creen que no sirve quererte,que no quieren perder el tiempo en escucharte,siempre estarán equivocándose.Tropezando en sus vidas al no saber valorar a quienes realmente lo merecen.Y esque,las personas cambian tanto que siento que no puedo pararme a observar si crecen o disminuyen,si sus almas ensanchan o se hacen cada vez más frías,porque la única alma que siento cerca...el único corazón que late doblemente fuerte cuando el mío se para...

Es el tuyo...



Te amo.


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