Que últimamente se vuelven diferentes, frías...irracionales e inimaginables.
Es como si nada me importase, como si no pudiera hacerme daño nada, como si tuviera fuerzas y descaro para salir de todos los problemas de cualquier manera.
Y no sé si es bueno o malo, pero nada tiene la suficiente importancia. Yo me siento bien. En pie.
Hago lo que sea por salir ilesa de los problemas, y giro la cabeza y sigo hacia delante.
Ya me las apañaré.
Igual de consciente que siempre, igual de competitiva, igual de descarada, igual de fuerte. Siempre.
Y para no variar, sigo sin arrepentirme de nada.
Arrepiéntete de lo que no hagas.
1 comentario:
Como eres un pez que vive en agua, no te "salpican" :)...
Espero que todo mejore, nos vemos por terrenos Sevillanos...
Un beso!
Publicar un comentario