jueves, 23 de junio de 2011

Voy a cambiar tu vida.

Porque sé que puedo hacerlo.



Eh tú, seas quien seas, detrás de esa pantalla, mírame.


No soy una más.
No quiero que pienses que lo soy.
Puedo girar como una peonza y hacerte feliz.
Puedo hacer que todo tenga sentido y veas la luz más allá.
Lo sé porque me he salvado a mí misma de las sombras un millón de veces.

He recuperado las alas todas las veces que me las han arrancado, y no me he rendido.
Y si puedo con mi propio peso, y con el de mi alma cargada, podré con el tuyo.
Puedo hacer que cada día sea una aventura, un nuevo juego, algo que descubrir.
Podría hacer que sonrieras sin tener que contarte un chiste, o hacer el tonto.
Podría hacerte llorar de emoción sólo con unas palabras en un papel...

Pero las personas de hoy en día no se fijan en el brillo de los ojos, ni en las sonrisas.
Sólo en ese cartón que parecemos llevar delante, que frena sus instintos de conocer y explorar.
No ven esa silueta de sombra que se forma en el suelo cuando caminamos, ni la manera de mover las manos, ni siquiera se fijan en cómo vuela nuestro pelo al caminar o hacer un gesto. No. En eso no.
No quieren bucear en nuestras mentes y saber qué nos duele o nos hace felices.
Estoy esperando a que me descubran.

A que quieran nadar en mis neuronas azules.
Espero a ver caras de sorpresas cuando cuente todas las anécdotas que tengo.
Espero a que me agarren fuerte de la mano cuando vivamos momentos insólitos.
Espero a cantar a voz en grito y a dúo, sin pensar en nadie que se moleste.
Espero a viajar kilómetros sin miedo a perdernos, porque estaremos juntos.


Espero a hacerte feliz.


Espero cambiar tu vida.
Porque puedo hacerlo.



Sólo si me dejas...

1 comentario:

Isi G. dijo...

Gracias por robarme una sonrisa, belleza azul :) Un besazo enorme^^